Predigo...
Días negros para la humanidad,
que no están relacionados con el anochecer.
Horrible torturas y lágrima derramadas,
que nada tienen que ver con un arma.
El derramar de sangre justa y limpia,
que ni la más noble guerra podría justificar.
Predigo la muerte de la tibia sonrisa,
que ayer en tus labios a tu amigo compartías.
Predigo la falta.... como el más duro de nuestros castigos.
Falta de paz, falta de amor, falta de justicia, falta de bondad y sobre todo, falta de amistad... y todas estas faltas emanan de nosotros.
Sin más ni menos, predigo que la culpa es de otros a falta de espejos, que la decadencia proviene del más alto trono a falta de los nobles súbditos,
que en tal caso no permitirían que la injusticia se suscitara.
y te digo a ti, amigo, compañero, cómplice, que empiezas a ser parte de esta horrible falta....
una atroz falta de humanidad...
Lo he visto en sus ojos, lo he visto en sus acciones, los he visto vivirlo y considerarlo como parte integra de un día más...
y el poder hacer se queda corto, ya que al intentarlo no sabría decir si habrá ese alguien que me acompañe a luchar.
Y el luchar va más allá de cualquier triste enfrentamiento, de cualquier muestra de odio al enemigo.
Veo como ahora no hay amor, un amor limpio que no espera nada a cambio;
si no muy por el contrario, el reclamo, la mentira, la sobervia, el error de no admitir que te hace daño, el creer la verdad absoluta como tuya, el no ver las cosas en su perspectiva...
Date cuenta pues, que la verdad no existe y nunca existió, que la verdad reside en lo noble de tu alma y tu pensar y en lo bien que puedas aceptar lo que los demás lleguen a añorar.
No esperes llegar a comprenderlo, no esperes llegar a ser perfecto, no pidas nada a cambio,
pero al contrario, espera... y espera toda un eternidad si es necesario, porque algo relativo tiene que cambiar.
Y lo vivo, y lo siento y lo comprendo... pero quiero que tú también lo comprendas y que lo puedas ver, ya que la solución redice en el problema y las solución es tan corta que parece imposible de alcanzar.
Puedes vivir con esto y dejarlo pasar.... y tener sus consecuencias.
O puedes luchar por cambiar, aunque sea a tu propia persona, y darte cuenta, pues, que nunca, nunca vas a estar sólo...
"Inspirado en el presente que día con día se hace más cierto, me gustaría que lo reflexionaran, pero no lo que yo he escrito, si no lo que ustedes mismos pueden escribir.... verán pues, a su tiempo, lo que yo he visto, lo que significa cada palabra y lo que, si tenemos suerte, ustedes tienen que hacer. No se desanimen nunca, Diego, Erelí, que yo confío en ustedes y sepan que siempre me van a tener consigo a su lado..."
Días negros para la humanidad,
que no están relacionados con el anochecer.
Horrible torturas y lágrima derramadas,
que nada tienen que ver con un arma.
El derramar de sangre justa y limpia,
que ni la más noble guerra podría justificar.
Predigo la muerte de la tibia sonrisa,
que ayer en tus labios a tu amigo compartías.
Predigo la falta.... como el más duro de nuestros castigos.
Falta de paz, falta de amor, falta de justicia, falta de bondad y sobre todo, falta de amistad... y todas estas faltas emanan de nosotros.
Sin más ni menos, predigo que la culpa es de otros a falta de espejos, que la decadencia proviene del más alto trono a falta de los nobles súbditos,
que en tal caso no permitirían que la injusticia se suscitara.
y te digo a ti, amigo, compañero, cómplice, que empiezas a ser parte de esta horrible falta....
una atroz falta de humanidad...
Lo he visto en sus ojos, lo he visto en sus acciones, los he visto vivirlo y considerarlo como parte integra de un día más...
y el poder hacer se queda corto, ya que al intentarlo no sabría decir si habrá ese alguien que me acompañe a luchar.
Y el luchar va más allá de cualquier triste enfrentamiento, de cualquier muestra de odio al enemigo.
Veo como ahora no hay amor, un amor limpio que no espera nada a cambio;
si no muy por el contrario, el reclamo, la mentira, la sobervia, el error de no admitir que te hace daño, el creer la verdad absoluta como tuya, el no ver las cosas en su perspectiva...
Date cuenta pues, que la verdad no existe y nunca existió, que la verdad reside en lo noble de tu alma y tu pensar y en lo bien que puedas aceptar lo que los demás lleguen a añorar.
No esperes llegar a comprenderlo, no esperes llegar a ser perfecto, no pidas nada a cambio,
pero al contrario, espera... y espera toda un eternidad si es necesario, porque algo relativo tiene que cambiar.
Y lo vivo, y lo siento y lo comprendo... pero quiero que tú también lo comprendas y que lo puedas ver, ya que la solución redice en el problema y las solución es tan corta que parece imposible de alcanzar.
Puedes vivir con esto y dejarlo pasar.... y tener sus consecuencias.
O puedes luchar por cambiar, aunque sea a tu propia persona, y darte cuenta, pues, que nunca, nunca vas a estar sólo...
"Inspirado en el presente que día con día se hace más cierto, me gustaría que lo reflexionaran, pero no lo que yo he escrito, si no lo que ustedes mismos pueden escribir.... verán pues, a su tiempo, lo que yo he visto, lo que significa cada palabra y lo que, si tenemos suerte, ustedes tienen que hacer. No se desanimen nunca, Diego, Erelí, que yo confío en ustedes y sepan que siempre me van a tener consigo a su lado..."