Escribo. Escribo que escribo. Mentalmente me veo escribir que escribo y también puedo verme ver que escribo. -Salvador Elizondo. El Vitral Por: Alejandra Cárdenas Christian despertaba rápidamente de un sueño presuroso. Los tenues y confusos juegos de luces de un próximo amanecer, se colaban por los barrotes blancos de su ventana, y llegaban hasta las cortinas casi transparentes que adornaban su habitación. Las 5 de la mañana, era la hora precisa para despertar. El amanecer se acercaba más y más rápido, como si éste se preparara para infectar con sus rayos de vida a todo aquél que se encontrara a la intemperie. Un amplio vitral de colores adornaba la sala de Christian, él se guiaba lentamente en la oscuridad de una próxima alborada, hasta llegar a esa gruesa y lisa superficie. El vitral recordaba a uno mil veces mencionado por su papá, que estaba lleno de colores. Él siempre le contaba que esa obra maestra estaba lejos, muy lejos de su casa, colocado en una
Siente el pensamiento, piensa el sentimiento ♥